Sodomizado por Mi Dueña

Bueno estoy poniéndome al día y haciendo los deberes. Recuerdo el comentario de un lector que decía si era posible leer un relato de sodomización. Si la verdad que es posible. Los dejo con el relato de michifuz{ }.

Sodomizado por Mi Dueña

Había estado arrodillado un largo rato a los pies de Mi Reina, sentada en la cama, con mi cabeza en su regazo como una perrita que busca que Su Dueña le haga mimos acariciándole la cabeza, mientras besaba sus muslos y lamía su mano.Entonces Mi Reina se levantó y me dejó arrodillado mirando la cama vacía. Cuando volvió a sentarse delante de mí, tenía colocado un strap on de jelly anaranjado intenso, la nueva pija de Mi Dueña, que relucía ante mis ojos con sus estrías y con todo el poder que le daba su tamaño. No pude evitar honrar a la pija con que me iba a violar luego, posando mis labios con reverencia en su cabeza. Mientras, Mi Ama me trataba de tranquilizar diciendo que este consolador era un poco más pequeño que el anterior y que no me iba a quejar por los últimos dos centímetros. Yo nunca pude ver al anterior, pero la pija que tenía delante no me parecía para nada pequeña. Además, era mucho más grande que la mía lo cual lo hacía muy humillante.
Mi Reina me indicó ponerme en cuatro patas al lado de la cama y la obedecí enseguida. Allí estaba yo, en cuatro patas, con medias con portaligas negras, una tanguita rosa con el frente transparente y un collar de perro al cuello del que pendía una larga y pesada cadena, con mi cola orgullosamente levantada, tratando de ser la perrita más sexy para Mi Dueña.
Y Mi Dueña me bajó la tanguita y me empezó a abrir y lubricar la colita con los dedos de su mano enguantada. De a poco mi resistencia iba cediendo y sus dedos ganaban terreno y me distendían más, hasta que Mi Reina cambió sus dedos por la punta de su pija, que se curvó al comienzo pero luego quedó alineada con mi colita y empezó a entrar de a poco, mientras yo abría la boca sorprendido por la invasión de su pija, que no me parecía ni un ápice más chica que la que Mi Ama había usado para romperme el culo la primera vez. Las estrías (yo diría escamas) de su poderosa verga iban entrando dentro mío una por una, como si fueran midiendo cuan profunda era la penetración. Y, poco después, la pelvis de Mi Dueña hizo tope contra mi cola, empujando con firmeza luego de haberme clavado su pija entera en mi culo aún poco entrenado. Yo, como buena perrita en celo, empujaba mi grupa hacia atrás, autoempalándome en la verga que me estaba poseyendo. Y entonces empezó Mi Ama a cogerme, primero con movimientos cortos y lentos, luego cada vez más rápidos, mientras se escapaban de mi boca gemidos cada vez más fuertes y mi respiración se hacía más agitada.
Cada embestida me hacía más puta, más suya y yo era una perrita orgullosa de ser la primera en recibir la nueva pija de Mi Reina en mis entrañas. Mi boca estaba ya seca por gemir tanto y tan agitadamente cuando Mi Reina retira su pija casi por completo y luego me la vuelve a meter hasta el fondo. Aunque esta primera vez lo hizo con suavidad, igual la sensación de ver como su pija me llenaba la cola en pocos segundos me dejó con la boca y los ojos bien abiertos, sin aliento pero queriendo más. La cadena colgaba del collar de mi cuello y yo deseaba que Mi Dueña la usara como las riendas de un caballo, controlando mi ritmo y tirando hacia atrás para forzarme a recibir bien hondo su enorme falo avasallador.Luego repitió la misma embestida profunda, pero ya con menos suavidad y mi cola la recibía sumisa pero deseosa a la vez. Y, con sus manos agarrando mi cintura, Mi Reina empezó a cabalgarme cada vez a mayor ritmo, mientras mi cola salía al encuentro de su pelvis y mis gemidos se mezclaban con los de Mi Dueña, cada vez más rápidos, cada vez más frenéticos. Mi Dueña era como un macho cabrío a punto de acabar, el macho que me hacía su hembra y estaba a punto de vaciar su leche en mi interior, bombeando cada vez mas fuerte, cada vez más profundo, cada vez más rápido.
Mis rodillas, que absorbían la energía del impacto, me dolían (luego de estar casi una hora arrodillado) y el cosquilleo de ese dolor se mezclaba con las sensaciones fuertísimas que me producía el ariete de Mi Ama abriéndose paso en mis entrañas. Y así, como un poderoso perro macho que acaba de servir a una perra en celo, Mi Dueña fue reduciendo el ímpetu de sus embestidas y recostó su torso sobre el lomo de esta perrita bien puta y aún alzada.
El vacío que sentí cuando Mi Reina retiró su pija de mi interior duró poco. Enseguida la reemplazó con el enorme butt-plug, el mismo que en otras ocasiones le costó colocarme y me produjo dolor, pero esta vez entró con suma facilidad, devolviéndome la sensación de ser una perrita bien cogida, con una buena pija en el culo.Y así, Mi Dueña me va convirtiendo, me va moldeando, haciéndome cada vez más puta, cada vez más adicta a su pija, cada vez más suya.

michifuz{ }